Dr. Oreste Lo Iacono

Gastroenterología y Hepatología

Hospital San Francisco de Asís Madrid  – C. de Joaquín Costa, 28

Problema digestivo con pruebas diagnósticas negativas

  • Dolor abdominal que no tiene relación aparentemente con nada y que vuelve a presentarse todos o casi todos los días.
  • Cambios en el ritmo intestinal con tendencia a diarrea realizando varias deposiciones al día a veces con la urgencia de buscar el servicio más cercano.
  • Hinchazón de la tripa coma lo coma.
  • Sensación de barra o plenitud a pesar de comer poco.
  • Estreñimiento o sensación de defecación incompleta que condiciona el estado de ánimo.
  • Sensación de malestar digestivo que es difícil de explicar.

Estos son algunos ejemplos de síntomas digestivos que motivan una consulta y la realización de pruebas que muchas veces resultan negativas.

El diagnostico en general es de patología funcional o dolor abdominal no especifico o “no se preocupe no tiene nada”.

Son síntomas de difícil tratamiento que, a pesar de no estar relacionados con ningún “daño” evidenciable con las pruebas diagnósticas, afectan el día a día del paciente, condicionan sus relaciones y a veces hasta su trabajo.

Además, no tiene ni el consuelo de la compasión: “Si todas las pruebas son negativas es que no tiene nada”.

¿Cómo se puede abordar e intentar solucionar estos síntomas?

            El estómago, el intestino y todo el aparato digestivo al igual que el corazón, los pulmones o el cerebro no son compartimentos separados que trabajan cada uno por su cuenta, son parte de una unidad que es el cuerpo. Una unidad donde lo que afecta al cuerpo afecta al cerebro y al revés lo que afecta al cerebro afecta al cuerpo. Por esto es necesario conocer el paciente y valorar sus síntomas también en relación con su día a día, sus sentimientos y su trabajo. A pesar de las pruebas negativas el paciente padece un síntoma o una condición que afecta su cualidad de vida y esta también es patología que necesita una solución.

            Non soy psicólogo ni psiquiatra, ellos tratan otras patología, siendo gastroenterólogo y basando mis actuaciones en las evidencias clínicas, he añadido a mi formación la terapia psicosomática relacional para poder curar “la persona” y no simplemente “el síntoma”.

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Psicosomática relacional: cuerpo y mente siempre en positivo.

 

Padecer síntomas y “estar mal”, afecta siempre, en mayor o menor medida, tanto nuestra parte somática que nuestra parte psíquica.

Cada paciente vive sus síntomas o sus diagnósticos de una forma distinta: un dolor abdominal, un cambio en habito intestinal, el diagnostico de una patología del hígado o del páncreas no necesariamente implican los mismos cambios o la misma respuesta en cada paciente.

Por esto es necesario individualizar y personalizar tanto los diagnósticos como los tratamientos teniendo siempre presente que cuerpo y mente son una unidad y no dos entidades separadas que trabajan de forma independiente.  

Esta unidad no es la simple suma de los dos factores: cada ser humano vive su enfermedad y sus síntomas de forma distinta, condicionada fuertemente por su realidad personal y su vida diaria, por lo cual la “unidad” de la parte somática y de la parte psíquica es una integración de los dos factores que es necesario valorar siempre en el proceso diagnóstico y terapéutico.

Desde el inicio de mi actividad profesional he considerado fundamental la relación médico-paciente y por esto he complementado mi formación clínica primero con los grupos Balint y sucesivamente con la psicosomática relacional.

La formación en psicosomática relacional, que sigo adquiriendo actualmente, me permite una mejor valoración de los problemas clínicos personalizando tanto el diagnostico como el tratamiento del paciente individual.

Esta terapia se aplica en todas mis consultas y estableciendo una relación directa con el paciente que facilita tanto el diagnostico como el tratamiento y el seguimiento.

Es importante entender que mis consultas son exclusivamente clínicas y no tiene nada que ver con el trabajo de psicólogo o psiquiatra los cuales realizan un trabajo totalmente distinto y tratan otras patologías.

Todas mis actuaciones diagnósticas y terapéutica se sustentan en la medicina basada en las evidencias científicas añadiendo una valoración personalizada del paciente y de sus problemas.

En algún paciente y por alguna patología crónica pude ser necesario planificar una especifica terapia de psicosomática relacional, basada en sesiones semanales o quincenales, que complementa el diagnóstico y tratamiento ayudando a entender como su especifica patología está afectando la vida real del paciente individual.

Para más información puedes preguntarme.

Para saber más: Centre International de Psychosomatique – Paris (France)

 www.cips-psychosoma.org